¿Sabias que el mercado de coches de segunda mano es uno de los que más crece en España? La oferta de coches en este segmento comercial es diversa. No obstante, es uno de los mercados donde mayor cuidado hay que tener a la hora de escoger, pues no todos los coches se encuentran en perfecto estado. Un revisión mecánica y diagnosis te ofrecerá mayor tranquilidad y seguridad.
¿Qué es lo que se recomienda para realizar una prueba mecánica para un coche? Una verificación completa, un diagnóstico electrónico y una prueba dinámica. Con la revisión no existen dudas, hay que explorar a fondo cómo está constituido el coche (interior, exterior, documentos). No obstante, es con la diagnosis en la cual no existen acuerdos, pues no hay parámetros definidos para llegar a decisiones a través de ella.
No obstante, en Informes mecánicos, queremos ayudarte a saber cómo debes hacer la revisión y diagnosis completa de un vehículo de segunda mano para tomar la mejor decisión. Veremos qué aspectos deben comprobarse a la hora de una revisión y con qué debe realizarse el diagnóstico electrónico y qué puntos son importantes analizar antes de decidir. ¿Te lo vas a perder?
Revisión de un coche de segunda mano
¿Qué aspectos cubrir para revisar un coche? Pues van desde los aspectos exteriores a los interiores y los aspectos mecánicos. Inclusive debe considerarse la documentación que acompaña al vehículo y si su información se corresponde con su estado actual.
Revisión interior
Una de las revisiones que impactará tu comodidad y la seguridad a la hora de conducir es el interior del coche. Ahora bien, ¿por donde empezar esta revisión? Pues vamos a darte algunas indicaciones a modo de recomendación:
- Lo primero, asientos y cinturones de seguridad. Lo asientos deben tener, además de su exterior limpio, facilidad para ajustarse. Esto último requiere hacerse sin dificultades: desplazarse hacia atrás y adelante, mover el respaldo, graduar la altura del reposacabezas, entre otros aspectos.
- Si los asientos están cubiertos con fundas protectoras, es probable que quieran esconderse daños en la superficie de estos. Así que pide que sean removidas para ver el estado real de los asientos.
- Volante y palanca de cambios: son dos elementos que comprobarán el uso que ha tenido el coche. Asimismo, que la palanca a nivel de funcionamiento permita la introducción de las velocidades sin problemas.
- Los plásticos interiores pueden revelar la edad del coche. Si los ves demasiado desgastados y teniendo evidencia de un bajo kilometraje, lo mejor es revisar más o descartar la elección.
- ¿Cómo funciona el sistema de calefacción? Fundamental para aumentar el confort al desplazarnos, independientemente de la estación.
- Por último, el tablero principal debe comprobarse que tenga un funcionamiento adecuado, en especial las luces testigo, que enciendan debidamente. Eso sí, si pasado un cierto tiempo, verificas que quedan encendidas muchas luces testigo, es probable que el coche tenga más fallos de los reportados.
Revisión exterior
Entre los elementos que se deben observar del exterior de un coche, podemos resaltar los siguientes:
- La carrocería se puede comprobar con una simple inspección ocular. Es uno de los elementos exteriores que está sometido al clima y a los desperfectos como producto de choques. En ese caso, debe buscar bultos o imperfecciones en la pintura, que evidencien reparaciones anteriores (no declaradas). Asimismo, debe revisar los bajos del coche, quienes pueden evidenciar una conducción agresiva o descuidos a la hora de estacionar.
- Los faros también deben verificarse, y observar si son o no iguales. Puede que haya existido algún incidente que haya obligado a su reemplazo.
- Las separaciones (holguras) existentes entre juntas o ranuras. Las distancias entre estas deben ser uniformes. Cualquier variación es síntoma que el coche ha sufrido percances severos (colisiones).
- Revise cómo abren y cierran todas las puertas. Preste especial interés en comprobar el funcionamiento de las bisagras y las cerraduras, que permitan la apertura y cierre, tanto por fuera como por dentro.
- El maletero es un lugar que merece especial atención. Tómese su tiempo para revisar gomas, pintura interior, su puerta y funcionamiento, entre otros aspectos.
- Los neumáticos, esos que siempre están en contacto con el camino. En ellos debes comprobar el ranurado, la llanta, sus tuercas, entre otros aspectos.
- Los retrovisores exteriores, revisa que no presenten movimientos que puedan evidenciar desprendimiento, así como que el espejo tenga excelente estado.
Revisión mecánica
Más allá de una prueba, representa uno de los momentos más importantes a la hora de elegir un coche de segunda mano. La revisión mecánica comprueba el estado del motor y su interacción al andar y con otros componentes como los son las ruedas, sistemas de frenos, escape y los líquidos que consume.
- Cuando revise el motor, debe comprobar la cantidad de kilómetros recorridos. Estos se pueden apreciar de forma simple en el cuenta kilómetros. No obstante, deben coincidir con el libro de reparaciones, pues en este documento deberán quedar expresados los diversos mantenimientos y a qué distancia recorrida fueron hechos.
- Revise la suspensión y el sistema de amortiguación, los cuales no deben hacer rebotar el coche en caso de que los manipule en estado de reposo. Un coche que rebota es síntoma de suspensión desgastada, producto de una conducción brusca de su propietario.
- El sistema de frenos es otro de los importantes a revisar, pues este representa un sistema de seguridad pasiva. Un sistema de frenos conservador hará su función sin vibraciones o ruidos molestos. Examine discos, tambores, pastillas e inclusive el freno de estacionamiento (comúnmente conocido como freno de mano).
- Los fluidos, parte importante de diversos sistemas como la transmisión, la dirección, la refrigeración de la máquina y el sistema de frenos. Todos los niveles deben estar por encima de los niveles medios (entre marcas). Asimismo, no deben existir fugas.
- Por último, el sistema de escape no debe tener problemas (oxidación, desprendimiento), y los gases que expulsa serán lo más translucidos posibles. Si verifica algún color como el blanco, gris, azulado o negro, esto es producto de problemas en la combustión.
Diagnosis de un coche de segunda mano
En la actualidad, para conocer mayores detalles acerca del funcionamiento mecánico del coche, se cuentan con máquinas de diagnóstico electrónico. Estas máquinas especializadas permiten saber en que estado real se encuentra el vehículo, empezando por su recorrido real.
Actualmente, son pocos los talleres mecánicos que no tienen entre sus equipos una de estas máquinas. Esto se debe a que desde hace cierto tiempo se han ido introduciendo diferentes sensores conectados a una CPU llamada también “la centralita”. Esta última se encarga de almacenar la información de los diversos parámetros registrados y reflejar en el tablero si existen averías.
La diagnosis electrónica es un proceso más rápido que la comprobación física y mucho más económico. Además, no afecta para nada la garantía del coche (si aún la tiene). Es un complemento de la revisión física e incluso una ayuda para los mecánicos, pues con la lectura de los datos aportados, podrán determinar donde están los fallos e intervenir de forma rápida y directa en ellos.
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Esperamos que estos consejos te ayuden revisar mejor ese coche de segunda mano que tanto te gusta. Y si estás buscando la revisión más profesional del mercado, recuerda contactar a Informes Mecánicos.
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